Perdiendo Tu Identidad.

 

La identidad es el elemento que caracteriza a cada persona, siendo un complemento de sus rasgos físicos, atributos y actitudes.

Me sorprende el hecho de que hoy día muchas personas por temor al qué dirán o simplemente a expresar sus ideas con libertad y coherencia, opten por transmitir a la sociedad una forma de ser que no se corresponde con la realidad y la esencia de su personalidad.

Vemos personas que influyen en su pareja de tal manera que terminan arrastrándola a su forma y estilo; con frecuencia dejando consecuencias negativas o desagradables. Intentamos encajar en círculos sociales, proyectando una personalidad tipo álter ego y totalmente diferente a la realidad de nuestro ser. Esto con la intención de sentirnos aceptados y valorados aunque sea algo circunstancial y efímero.

Es innegable que todo ser humano necesita sentirse especial, pero no es menos cierto que muchos factores de tipo social habitualmente no le favorecen, esto sumado a elementos como: La baja autoestima, inseguridad, rechazo social, etc. son los responsables de resultados conductuales de ese tipo.

 Ese es solo el primer peldaño en la larga escalinata de consecuencias que vienen a raíz de esa acción, algunos ejemplos son: Confusión, Mitomanía, Refugio en la Fantasía, Dependencia, Miedo a la Pérdida de Control, Etc.

Individualmente debemos autoanalizarnos y evaluar nuestro accionar minuciosamente para identificar si estamos siendo influenciados de alguna manera en nuestra toma de decisiones, forma de vida y actitudes, y no nos estamos dando cuenta. Debemos practicar actividades que fortalezcan nuestra personalidad de forma positiva, ya que mientras más nos conozcamos será mucho mejor y más fácil alcanzar nuestras metas y superar nuestros errores o fracasos.

Otro ejemplo es el caso de personas que tienen hijos y los crían heredándoles sus temores, gustos y aptitudes, los niños lo asimilan y no desarrollan sus propios recursos innatos y se hacen dependientes e inútiles, incapaces de enfrentar los retos de la vida.

Así que estemos alertas a esta patología social que se intensifica cada día y aprendamos a la vez a identificarla cuando se avecine a nuestras vidas. Seamos cautos con aquellos que lo tienen por práctica, ya que como dije anteriormente: eso muchas veces deja consecuencias negativas o desagradables.

Hasta otra entrega.-